INTRO
Después de 6 años viajando a Bélgica para competir en las copas del mundo de trial UCI, tenía
muchas ganas de hacer un viaje de este tipo, sin presión, sin horarios apretados, solo bicicletas,
amigos, cultura, comida y disfrutar de las rutas. Es por eso que decidí ir a Flandes, había estado
muchas veces pero nunca había tenido tiempo para visitar nada. Así que empezamos a montar
una ruta donde pudiéramos hacerlo todo: pedalear, descubrir nuevas zonas y disfrutar de todo lo
que tiene Flandes
En este viaje me acompañó Laura Martí, actualmente muy centrada en la competición pero le
apetecía mucho este plan ya que nunca había estado en Bélgica y quería disfrutar de las
carreteras de las míticas carreras como el Tour de Flanders ( De Ronde van Vlaanderen ) o las
clásicas. También vino Marie Detouche, empezó compitiendo en triatlón de pequeña hasta que
dejó el mundo de la competición para disfrutar del deporte desde otro punto de vista. Ahora
destina todo el tiempo que puede a su pasión, pedalear, descubriendo los mejores rincones y
paisajes donde la bicicleta de carretera le pueda llevar.
DÍA 1: Kortrijk – Gante
Empezamos el día en en Kortrijk con el objetivo de llegar a Gante por la tarde. Podríamos dividir
la ruta en 2 partes. La primera mitad, hasta Oudenaarde, pasamos por carreteritas secundarias
en medio de campos y granjas y algún molino. También cruzamos tramos de adoquines y en
esta parte de la ruta todo eran subidas y bajadas, cortitas pero todo el rato como un tobogán.
Pasamos por pueblos muy pequeños como Bellegem, Otegem y Berchem.
Llegamos a Oudenaarde donde paramos en el “Centrum Ronde van Vlaanderen” donde paramos
a comer y a tomar un café y nos quedamos sorprendidos con la exposición de camisetas,
bicicletas, componentes e incluso adoquines míticos que tienen y que forman parte de la historia
del ciclismo.
La segunda parte del día fue totalmente llana. Rodamos por una via verde que discurría al lado
del canal de Bovenschelde que nos llevó hasta Gante. Allí dimos una vuelta por el centro
pasando por delante de la catedral de Gante (Sint-Baafskathedral), el castillo Gravensteen, el
campanario de Belfort y la iglesia de San Nicolás entre otros.
Durante todo el día hicimos tramos de la “Ruta de las Colinas” y la “Ruta de la Escalda” ya
hechas e indicadas.
Des de allí tomamos un tren hacia Brujas. Cenamos en Gran Kaffee de Passage donde
conocimos al propietario quién nos contó que él era la quinta generación de su familia en llevar el
restaurante y el hotel. Antes de ir a dormir dimos una pequeña vuelta por el centro para ver el
GroteMarkt y el campanario iluminados por la noche.
DAY 2: Brujas loop
Empezamos el día rodando por una de las vías verdes que va alrededor del casco urbano
medieval de Brujas (Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO), siguiendo un canal,
atravesando calles de adoquines, edificios de ladrillo y muchos puentes.
Salimos de la ciudad para dirigirnos a Damme, atravesando campos y rodando por vías verdes,
con trozos asfaltados y trozos con “sterrato”, muy suave y agradable de rodar. Llegamos a Sluis
( Holanda ) e hicimos una parada para comer un poco, luego seguimos dirección la reserva
natural de Zwin. Rodamos un buen rato por “sterrato” en medio de los arroyos y las salinas que
se llenan de agua cuando la marea sube.
Al salir de la reserva natural pedaleamos dirección Knokke-Heist por la “Ruta de la Costa” hasta
la ciudad de Blackenberge. Un tramo muy diferente a lo que habíamos visto antes ya que no nos
separamos del mar en todo el rato. Repostamos un poco en Blankenberge y volvimos hacia
Brujas atravesando el Uiterkse Polders, una zona de prados salinos donde se han adaptado
roadbike SUMMER 2022 diversas plantas y aves para anidar como la avoceta o el aguilucho lagunero. Es una zona totalmente llana y muy bonita por la que rodar, no nos cruzamos ni un solo coche en los 15km que hicimos hasta llegar a Brujas. Una vez más, recogimos todo, y cogimos un tren hasta Amberes